María Isabel Carrasco Belmar tiene 77 años, 12 hermanos, 5 hijos. Y una vocación tardía: la pintura. Su hijo Miguel Hermosilla presentó un proyecto a Fondart Regional 2014 en un “intento formal, local, familiar y genealógico por hacer que nuestra madre desarrolle, con la valoración y el protocolo adecuado para un artista, su obsesión: la de expresar su mundo interno por años desplazados”, dice. El proyecto “CHAVELITA, la abuela que pinta raro y bonito” es hoy una muestra itinerante que exhibe el resultado de dos meses y medio de trabajo en los que Chavelita pintó cuadros en formato de 55 x 77 centímetros, bajo la técnica de acrílico sobre cartón. Se pueden ver hasta el 14 de septiembre en diversos espacios de exhibición de Quillota, la mayoría consultorios urbanos y rurales de la comuna.
Próxima fecha de exhibición